Cumbres que superan los tres mil metros de altura; ríos, barrancos, cascadas y ciénagas que nos hacen sentir, verdaderamente, el país del agua; más de 200 estanques de formas y colores diversos, y una gran diversidad de especies animales y vegetales que luchan para sobrevivir en un medio físico riguroso dan vida a este espacio natural protegido único del sur de Europa.
El planell d’Aigüestortes es un espacio totalmente llano, de bosques, prados y agua, donde encontramos un itinerario circular de pasarelas de madera, adaptadas para silla de ruedas y para personas con diversidad funcional. Es un itinerario de dificultad baja pero de gran belleza, ideal para hacer con niños.
Cavallers es un paraje con un paisaje más rocoso, abrupto, donde los caminos discurren entre roques de granito y donde encontraremos las cuatro cimas de más de 3.000 metros de la Vall de Boí. Es un paraíso para los amantes de la escalada en roca y en hielo, ya que cuenta con numerosas vías de diferente dificultad. Es el valle de los tresmiles, donde los Pirineos tocan el cielo.
Se concede a aquellos destinos que se consideran disponen de excelentes cualidades para contemplar el cielo nocturno y que están protegidos de cualquier contaminación luminosa. El Parque Nacional de Aigüestortes y Estany de Sant Maurici, así ha sido reconocido, garantizando además su protección y la integración de las infraestructuras y las actividades turísticas del valle.